El presidente Luis Abina­der está claro en que “es­te será un año difícil” para el país, como consecuencia de los fuertes impactos que tiene en la economía el ac­tual conflicto bélico entre Rusia y Ucrania.

El gobierno cree que el crecimiento económico que se había previsto para 2022, antes de que estalla­ra la guerra, habrá que re­considerarlo. Podría ser fi­nalmente de un 5.3 por ciento, no obstante las me­didas de control de la infla­ción que se están adoptan­do.

En este contexto, el presi­dente aseguró que se man­tendrán los subsidios a las materias primas y produc­tos básicos de la alimen­tación, como el arroz y el maíz, y los combustibles.