El creciente fenómeno de la desafección en los estudios de las ciencias políticas se entiende como el distanciamiento de la ciudadanía con la política, cosa que se muestra cada día más en las encuestas hechas a la población, que alcanza niveles altamente preocupantes en nuestros país, oscilando entre un 32% y un 38% de dominicanos que se sienten insatisfecho con los partidos, con los políticos y con nuestra incipiente democracia.
La desafección, disgustos, indignación, frustración frente a la política es también un cuestionamiento al sistema, que para la gente no está funcionando adecuadamente, porque no resuelve los problemas ancestrales de la nación, ni la demandas básicas de sus ciudadanos; es que está democracia representativa no es participativa, por ello no termina por convencer a las mayorías de que el sistema político protege y defiende los intereses de los muchos, más bien se ha convertido en excluyente, porque solo le sirve a los pocos que precisamente son los que más tienen, y que por ende son los que menos necesitarían del auxilio del Estado.