El acuerdo entre médicos, Gobierno y Administradoras de Riesgos de Salud (ARS) elevó el pago per cápita a la seguridad social en beneficio de las demandas que exigían los profesionales de la salud.
Las partes acordaron un incremento de honorarios de procedimientos médicos de un 20%, incluyendo ayudantes quirúrgicos y anestesiólogos; y un aumento en la tarifa de internamiento de un 30%.