Los involucrados en la red de narcotráfico desarticulada durante la Operación Falcón, crearon una “poderosa estructura del crimen organizado, que ha operado de manera sistemática y bajo un esquema típico de las organizaciones criminales transnacionales, vinculado a mega operaciones de narcotráfico que tenían como centro de mando, control y lavado de activos a la provincia de Santiago”.