La jueza de la Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente del Distrito Nacional, Kenya Romero, que acaba de dictarle 18 meses de prisión preventiva en Najayo a los implicados en el supuesto entramado de corrupción denominado Operación Coral, explicó en qué se fundamenta su decisión.

La jueza consideró que existen elementos suficientes que pueden sostener razonablemente que las personas son autores o cómplices de la infracción.