Los expertos ya han comenzado a expresar inquietudes acerca de los efectos secundarios que los Estados Unidos aún está por ver, por causa de la COVID-19. Específicamente, se espera que haya un aumento en el abuso de sustancias durante la pandemia y tasas más altas de adicción como resultado, debido al estrés del aislamiento, el aburrimiento, el acceso reducido a recursos de recuperación y el desempleo. De hecho, ya existe evidencia preliminar que apoya este efecto, en los grandes aumentos en las ventas de alcohol y en la demanda para la entrega de bebidas alcohólicas.