Una de las consecuencias de la política de ‘tolerancia cero’ del presidente Donald Trump es que 545 niños separados de sus padres al cruzar la frontera de Estados Unidos siguen sin poder encontrarse nuevamente con ellos, dijeron abogados que ayudan a reunificarlos en un documento judicial.

Ahora, la pandemia del coronavirus ha retrasado los esfuerzos y los abogados –incluyendo de la Unión Americana de Libertades Civiles, ACLU– creen que el 66% de los padres que no han podido ser contactados fueron deportados a sus países de origen, principalmente a Centroamérica.