Enedina reportó la desaparición de su hijo Víctor de 34 años en Hermosillo, Sonora, quien fue encontrado seis meses después sepultado bajo un domicilio de la colonia San Bosco.

La mujer logró localizar los restos luego del 13 de septiembre, cuando recibió un video de su hijo siendo golpeado mientras aseguraba que sus captores se habían confundido de persona.

El 15 de septiembre, Enedina, junto con otras madres del colectivo Buscadoras por la Paz, al que se unió en mayo, acudieron al lugar en el que Victor fue visto por última vez y tras picar el cemento de un pasillo, encontraron un tenis aún pegado a una pierna.