En el municipio de Sabana Yegua, provincia de Azua, residentes intentaron linchar a una mujer de 70 años, identificada como Isabel Ramírez y apodada “La Bruja Negra”, acusándola de practicar brujería y de haber “chupado” a varios niños en la comunidad. La multitud, indignada, también la responsabilizó por la muerte reciente de un menor, lo que provocó un estallido de violencia que fue contenido gracias a la intervención de la Policía Nacional.
Según los testimonios de los moradores, circulan rumores persistentes de que la mujer se desplaza “en un palo de escoba” y extrae sangre a recién nacidos. Algunos vecinos afirmaron que la familia del niño fallecido recibió instrucciones médicas de esperar 24 horas antes de enterrarlo, mientras grupos comunitarios exigían la expulsión inmediata de la señora del barrio, convencidos de su culpabilidad sin evidencias oficiales.
La acusada negó rotundamente las imputaciones, asegurando que nunca ha sido bruja y que su vida está dedicada a lo que llamó “la misión del Niño Jesús”. Ramírez afirmó temer por su vida y acusó a los agresores de actuar por ignorancia y violencia. La policía evitó que fuera linchada y mantiene vigilancia para prevenir nuevos intentos de agresión mientras se investigan los hechos.