Durante una emotiva entrevista en Sábado Extraordinario, el exponente urbano Pablo Piddy conversó con Brea Frank y el panel sobre su trayectoria, sus altibajos y el impacto que han tenido la fama y la industria musical en su vida personal. El artista expresó agradecimiento por el respaldo que aún recibe del público, destacando que, pese a todo, su barrio, su familia y sus seguidores se han mantenido firmes a su lado.
Piddy reconoció que atravesó una etapa de alejamiento y frustración, marcada por decepciones dentro del negocio y por la cercanía de personas motivadas más por el beneficio económico que por su talento. Admitió haberse cuestionado si debía abandonar la música, pero aseguró que el cariño del público —manifestado incluso al escuchar sus canciones de manera inesperada en la calle— le devolvió la fuerza para continuar.
En un mensaje sincero, el artista reflexionó sobre los sacrificios del ámbito artístico y el carácter cíclico del espectáculo, donde el éxito puede desvanecerse sin previo aviso. Agradeció el apoyo de comunicadores como Brea Frank e instó al público a valorar la música sin olvidar que detrás de cada artista hay una vida personal y una realidad humana. El programa cerró con un aplauso al intérprete, resaltando que el verdadero talento siempre encuentra forma de resurgir.
