Ubermoto inició operaciones en Santo Domingo con una tarifa mínima de veinte pesos y un formato que solo permite un pasajero por motocicleta. La plataforma exige licencia categoría 01 carnet de buena conducta y documentación de la motocicleta lo que abre una alternativa rápida de movilidad urbana.
La llegada del servicio generó rechazo entre motoconchos y sindicatos que denuncian competencia desleal y riesgo para el empleo tradicional del sector. Líderes del transporte exigen diálogo con la empresa y la autoridad para evitar conflictos y establecer reglas claras.
Las autoridades y los operadores deben priorizar controles técnicos y marco regulatorio que garantice seguridad fiscal y convivencia entre plataformas y los trabajadores locales. Es indispensable coordinar registro inspección y campañas informativas para prevenir confrontaciones y proteger a usuarios y conductores.
