Momentos de terror vivió la familia Tavares en la ciudad de Santiago, cuando un grupo de hombres fuertemente armados irrumpió en su residencia durante la noche del martes. Según relató uno de los miembros de la familia, se encontraban tranquilos viendo televisión cuando los asaltantes, haciéndose pasar por policías, ingresaron a la vivienda alegando que buscaban un supuesto contrabando. En cuestión de segundos, sometieron a todos los presentes bajo amenaza de muerte.

El señor Tavares explicó que los delincuentes tiraron al suelo a sus hijos, a su madre de más de 80 años, y a otros familiares que se encontraban en la casa. “Nos apuntaban con armas largas y exigían una caja fuerte que no existía”, narró con evidente angustia. Uno de sus hermanos, que vive al lado, fue también reducido cuando intentó intervenir tras escuchar la situación a través de una llamada telefónica abierta con un pariente desde Nueva York.

Durante el asalto, los atracadores sustrajeron una pistola registrada legalmente y otros objetos personales. Pese a la violencia con la que actuaron, ninguno de los miembros de la familia resultó herido, lo que los afectados consideran un milagro. Las autoridades han iniciado las investigaciones para dar con los responsables y esclarecer si los autores pertenecen a una banda organizada que opera bajo el falso amparo de uniformes policiales.