El escándalo de corrupción de la empresa estatal brasileña Petrobras continúa revelando su entramado de sobornos y manipulación de licitaciones, en el que participaron grandes corporaciones como Odebrecht y Andrade Gutiérrez. Según las confesiones de varios detenidos, las coimas pagadas entre 2004 y 2014 no solo sirvieron para obtener contratos millonarios, sino también para financiar partidos políticos y enriquecer personalmente a funcionarios involucrados.

En República Dominicana, el ministro de Obras Públicas y Comunicaciones, Gonzalo Castillo, aseguró que el caso no tendría repercusiones locales y que “no hay nada de qué preocuparse”. No obstante, un reportaje publicado por la revista Época el 31 de enero de 2013 contradice esa posición, al señalar que el expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva viajó al país para reunirse con el presidente Danilo Medina y el exmandatario Leonel Fernández.

Tres meses después de esa visita, el gobierno dominicano anunció una licitación para construir una central termoeléctrica en la región de Santa Catalina, proyecto que fue finalmente adjudicado a Odebrecht. El reportaje también destaca la relación de amistad entre Lula y Medina, así como el apoyo político que el Partido de los Trabajadores de Brasil habría brindado al presidente dominicano, facilitando además la participación del estratega Joao Santana, reconocido asesor de Lula y Dilma Rousseff, en la campaña electoral dominicana.