En su programa De Extremo a Extremo, el presentador Michael Miguel Holguín reaccionó a la muerte de John Percival Matos con un discurso cargado de análisis social. Señaló que el joven había mantenido al país en un estado de “ultra inquietud”, proyectando la imagen de alguien inatrapable, algo que —a su juicio— no puede permitirse en una sociedad regida por la ley. Recordó además su relación de amistad con el general retirado Rafael Percival Peña, padre del abatido, destacando la complejidad emocional del caso.
El comunicador subrayó que la situación no debía analizarse con mezquindad ni sobre el “árbol caído”, porque Percival Matos no era un fenómeno aislado. Lo enmarcó como producto de una sociedad dominicana marcada por la corrupción, la desesperación y el “sálvese quien pueda”. Aunque reconoció que la lógica de los derechos humanos no avala un desenlace de esta naturaleza, afirmó que la realidad social del país hacía prever este final.
Michael Miguel también cuestionó la forma en que algunos medios titularon la noticia, particularmente el encabezado “Muere el ladrón de bancos”, el cual consideró intencional y carente de sensibilidad. En su reflexión, instó al Estado a priorizar la paz social en 2017, recordando que la juventud dominicana necesita ejemplos distintos y que la violencia, la corrupción y el narcotráfico no son hechos aislados, sino síntomas de una crisis social más amplia.