Un hecho insólito se registró en las proximidades de un canal televisivo cuando un hombre fue detenido por autoridades municipales mientras depositaba fundas de basura en un contenedor. Según su versión, llevaba los desechos en el baúl de su vehículo porque no había pasado el camión recolector en su sector. Al intentar dejarlas en un zafacón público, fue interceptado por una camioneta de la alcaldía.

El ciudadano denunció que, lejos de lanzar los residuos a la vía pública, los colocó dentro de un depósito de basura. Sin embargo, agentes municipales lo acusaron de violar las normas. “Bárbaro, ¿dónde la voy a lanzar si no hay un zafacón?”, reclamó indignado, señalando además las deficiencias en el sistema de recogida de basura y lo que calificó como un intento de ocultar la realidad.

El incidente desató cuestionamientos sobre el manejo de los desechos sólidos en la ciudad. Mientras las autoridades aseguran que se mantiene un “magnífico trabajo” de limpieza, vecinos y ciudadanos afectados insisten en que la cobertura de la recogida es irregular. El caso reabre el debate sobre la falta de zafacones suficientes y la necesidad de soluciones efectivas para un problema que impacta directamente la calidad de vida urbana.