La gala de los Latin Grammy tuvo uno de sus momentos más emotivos con el homenaje a Marc Anthony, distinguido como Persona del Año. Aunque se especulaba sobre la presencia de su esposa Shannon de Lima o de Jennifer Lopez, el cantante asistió solo. La ausencia de su pareja alimentó rumores de separación, reforzados por la falta de apariciones públicas juntos desde hace dos meses.

La celebración posterior no pasó desapercibida: fotografías lo mostraron compartiendo con Jennifer Lopez y amigos cercanos en una fiesta privada, lo que intensificó las especulaciones sobre su vida sentimental. Aun así, la atención de la noche estuvo centrada en su trayectoria artística y en la emoción que mostró al recibir el galardón. Entre lágrimas, agradeció a sus colegas, familiares e hijos, asegurando sentirse “más vivo que nunca” tras tres décadas de carrera.

El tributo contó con presentaciones de artistas como Laura Pausini, Víctor Manuelle, Carlos Vives, Johnny Ventura y Millie Quezada, quienes interpretaron clásicos de Marc Anthony con estilos propios. Ricky Martin fue el encargado de entregarle el reconocimiento, dedicándole un emotivo discurso en el que recordó sus primeros encuentros artísticos en los años ochenta. La velada se convirtió en un repaso inspirador de la vida y legado del cantante puertorriqueño.