En directo desde 809 Lounge, Franchesca —la profeta— y Rosalba —la “buena loca”— ofrecieron una entrevista que conectó de inmediato con el público dominicano presente. Ambas creadoras digitales relataron su tránsito a la fama, mostraron fragmentos de su contenido viral y respondieron preguntas sobre su estilo polémico y su relación con los seguidores. El ambiente fue de cercanía y jolgorio, con aplausos constantes y reacciones espontáneas de la audiencia.
Franchesca explicó cómo un video casero la catapultó a redes y detalló el proceso de interacción con sus miles de seguidores; Rosalba, por su parte, defendió públicamente posturas controvertidas a favor de los hombres y expuso su filosofía de vida sin filtros. Los conductores articularon preguntas precisas y dejaron espacio para la demostración en vivo, un recurso que multiplicó la viralidad del evento y potenció la presencia mediática de ambas invitadas.
El encuentro sirvió además como escenario para discutir la influencia de los influencers en la conducta social y la responsabilidad de quienes generan contenido masivo. Especialistas y asistentes consultados coincidieron en que la capacidad para atraer audiencias convierte estos espacios en plataformas clave; sin embargo, advirtieron sobre la necesidad de equilibrio entre espectáculo y mensaje responsable ante una audiencia que emula comportamientos.