La controversia en torno al trato dentro de las filas policiales volvió a estallar con la denuncia pública del ex raso Starling Cruz Gómez, quien fue separado de la institución tras difundir un video en redes sociales acusando de maltrato a su superior, el mayor Jiménez Regalado.
Cruz Gómez, con más de tres años de servicio en la uniformada, afirmó que su comandante protegía a infractores de la ley y que le exigía 2,500 pesos mensuales para permitirle asistir a la universidad, suma que representaba casi la mitad de su salario. El ex agente reveló que con lo restante debía cubrir gastos de estudios y gasolina, situación que lo mantenía bajo una fuerte presión económica.
Residente en una vivienda humilde junto a su madre, el joven asegura que no se arrepiente de haber alzado la voz. “Lo mejor que puede hacer cualquier agente es usar la democracia y hablar públicamente para provocar cambios”, declaró. Aunque dejó la institución con pesar, llamó a sus ex compañeros a estudiar y prepararse, pues a su juicio, “dentro no hay nada”.