Desde el pasado viernes en la tarde, el ensanche Libertad de Santiago vive una fuerte conmoción tras la muerte de Delvis Daniel Vicioso, un joven de 23 años con condiciones especiales, quien falleció durante un operativo policial. Según testigos, Vicioso, conocido en la comunidad como Delvis, no era delincuente y presentaba limitaciones físicas y de lenguaje. La población asegura que levantó los brazos en señal de rendición, mientras gritaban a los agentes que no dispararan.
A pesar de las súplicas, los policías abrieron fuego, provocando la indignación de vecinos y familiares. Una empleada de una banca de apuestas narró que el joven la acompañaba diariamente para abrir y cerrar el negocio, y que incluso utilizó el micrófono del local para pedir a los agentes que no dispararan, advirtiendo que se trataba de un muchacho especial. “Le bajaron a tiros, y por poco me matan también”, relató.
Junto a Vicioso, murió otro joven señalado por la Policía como miembro de una banda delictiva. Sin embargo, la comunidad insiste en que Delvis era inocente y víctima de un error fatal. Este sábado, vecinos y familiares realizaron un encendido de velas en su memoria, y acudieron al Palacio de Justicia para exigir que el caso sea investigado a fondo y que se determinen responsabilidades en la actuación de los agentes.
