La miniserie Vivencias de la Calle, transmitida en el programa Cero es Tres, llegó a su impactante final mostrando la crudeza de la vida delictiva. En el desenlace, Cano, uno de los personajes principales, fue abatido tras ser traicionado por su amigo más cercano, Greñas.
La historia culmina cuando Greñas, presionado por la policía a cambio de borrar las fichas que pesaban en su contra, entrega a Cano. En un giro inesperado, no solo lo delata, sino que termina disparándole, sellando así la traición en medio de un supuesto atraco planificado.
El final de la miniserie refleja la realidad de muchos jóvenes atrapados en la delincuencia: un mundo marcado por la traición, la violencia y la ausencia de oportunidades. Cano muere a manos de quien consideraba su hermano, mostrando que en la calle, la confianza puede costar la vida.