Una disputa familiar por la alcaldía de Villa Vázquez, Montecristi, destapó un caso de usurpación de identidad que involucra al actual alcalde reelecto, Domingo de Jesús Rivas. En una entrevista televisiva, el propio funcionario admitió haber utilizado la identidad de su hermano Ramón Rivas para viajar a Estados Unidos en los años 1997, 2002 y 2008. El caso fue denunciado por la Fundación Villa Vázquez tras confirmar que el alcalde llegó a obtener una segunda cédula de identidad y pasaporte con los datos de su hermano.
Domingo justificó la acción alegando motivos personales y afirmó estar dispuesto a enfrentar cualquier consecuencia legal. Sin embargo, la suplantación de identidad viola el artículo 147 del Código Penal y el artículo 13 de la Ley 8-92 de Sedulación, que contemplan penas de hasta 10 años de reclusión y multas. El sistema biométrico implementado en 2014 impidió que el alcalde renovara la cédula falsa, lo que llevó a la exposición del caso.
Las versiones en torno a los motivos de la suplantación difieren: mientras Domingo asegura que fue “de paseo”, otras fuentes señalan que buscaba asistir a un hijo implicado en un caso de violencia. El hecho ha causado indignación en la comunidad y reabre el debate sobre la corrupción y la falta de consecuencias para funcionarios que violan leyes fundamentales. La Junta Central Electoral confirmó la existencia de las dos cédulas y anunció que el expediente fue enviado a la inspectoría para evaluación.