En una carta enviada al periódico Diario Libre, Nora Llenas, tía de José Rafael y madre de Mario José, uno de los condenados por su muerte, compartió sus sentimientos a 20 años de la tragedia que marcó a su familia. “Sufro por mi sobrino, por mi hijo, por mi cuñada, por mi hermano, por toda mi familia”, escribió, describiendo el dolor que persiste en todos los involucrados.

Llenas aseguró que no busca cambiar opiniones con sus palabras, pero relató cómo ha visto a su hijo asumir responsabilidades y pedir perdón como adulto, reconociendo que otorgar ese perdón depende únicamente de las víctimas. “Ninguna forma de castigo puede reparar la muerte de mi sobrino, pero no todos los castigos producen los mismos resultados”, expresó en su reflexión sobre la justicia y el propósito de la prisión.

En la misiva, también hizo un llamado a la compasión, recordando que sólo en Dios se encuentra la misericordia infinita y que el arrepentimiento honesto puede ayudar a recordar sin odio, aunque nunca se olvide la pérdida. “La reparación perfecta no existe, ni para lo simple como una palabra descompuesta, ni para lo infinitamente doloroso como es perder la vida de un ser querido”, concluyó con respeto.