Un grupo de voluntarios que realizaba labores de limpieza en la playa de Huntington Beach, California, se topó con una sorpresa tan inquietante como inesperada: el cadáver de una culebra panza amarilla, un reptil extremadamente venenoso y poco común fuera de su hábitat natural. El hallazgo ha sido calificado por expertos como “único”, ya que esta especie no suele encontrarse en la costa californiana.

Las autoridades ambientales creen que la presencia del reptil podría estar relacionada con los efectos del fenómeno climático de El Niño, el cual ha alterado corrientes marinas y desplazado a múltiples especies de sus zonas habituales. Aunque el ejemplar estaba sin vida, su sola aparición ha generado preocupación entre científicos y residentes.

Los especialistas instan a la ciudadanía a no tocar este tipo de animales, vivos o muertos, y a alertar inmediatamente a los servicios correspondientes. La culebra panza amarilla es conocida por su potente veneno neurotóxico, lo que refuerza la importancia de manejar este tipo de situaciones con extrema precaución.