La jueza suspendida Awilda Reyes Beltré rompe el silencio en una entrevista exclusiva para El Informe con Alicia Ortega, donde asegura que recibió órdenes “desde lo más alto del Poder Judicial” para liberar al regidor Erickson de los Santos Solís, acusado de sicariato. Según su abogado, dichas instrucciones provienen directamente del entonces presidente de la Suprema Corte de Justicia, Mariano Germán, a través del ex consejero Francisco Arias Valera, quien también habría entregado dinero como parte de la maniobra.
Arias Valera, por su parte, niega rotundamente haber dado órdenes o haber pagado sobornos. Cuestiona la autenticidad de un recibo filtrado que lo señala como responsable de entregar RD$350,000 a Reyes Beltré, y asegura que se trata de una falsificación. Mientras tanto, el Ministerio Público prepara un expediente penal, aunque Valera, al haber renunciado días antes del escándalo, evita el juicio disciplinario que sí enfrentan los demás jueces implicados.
La crisis sacude los cimientos del sistema judicial dominicano. Las declaraciones cruzadas, la filtración de documentos y la falta de respuestas claras por parte de las autoridades alimentan la percepción de una justicia capturada por intereses políticos. Reyes Beltré insiste en que no actuó sola y que, si se busca verdad, se debe investigar también a quienes dan las órdenes, no solo a quienes las obedecen.
