A pesar de recibir mensualmente más de 26 millones de pesos del Estado dominicano, el Hospital General de la Plaza de la Salud niega atención de emergencias a personas sin seguro médico si no pagan previamente una tarifa de 2,500 pesos, según constató un equipo de investigación que acudió de forma encubierta al centro. Esta práctica contraviene lo dispuesto por la Ley General de Salud 42-01, que garantiza la atención gratuita en situaciones de emergencia, especialmente en centros subvencionados por fondos públicos.
El informe revela una alarmante contradicción: mientras otros hospitales autogestionados como el Marcelino Vélez, Juan Bosch y Moscoso Puello enfrentan precariedades, al menos brindan atención inmediata en situaciones críticas sin costo alguno. En contraste, en la Plaza de la Salud no solo se exige el pago inicial para ingresar al área de emergencia, sino que, de requerirse análisis o medicamentos, estos deben ser abonados de inmediato o el paciente es despachado sin ser tratado.
Para dimensionar el problema, el equipo comparó los costos con clínicas privadas como el Centro Médico Real y la Clínica Independencia, donde la consulta de emergencia cuesta entre 1,200 y 1,260 pesos, casi la mitad de lo que exige la Plaza de la Salud, pese a que este hospital fue construido con recursos estatales. Aún más preocupante, este dato sobre la inversión inicial del Estado no aparece en la página oficial del hospital. La falta de acceso a atención urgente, agravada por el cobro obligatorio, plantea serios cuestionamientos sobre el uso de fondos públicos y la legalidad del funcionamiento de este centro emblemático.