La obsesión por los glúteos grandes se ha convertido en una tendencia dominante en la cultura estética de República Dominicana, donde cada vez más jóvenes optan por procedimientos extremos para modificar esta parte del cuerpo. Impulsada por referentes del medio artístico y el auge de las redes sociales, esta práctica continúa en aumento, a pesar de las advertencias médicas y los múltiples casos de complicaciones graves, incluyendo muertes.
Figuras populares, como modelos, cantantes y presentadoras, exhiben cuerpos con proporciones exageradas que muchas jóvenes consideran estándares de belleza. Esto ha generado una presión social intensa, alimentada también por las expectativas de sus parejas y los estereotipos de “cuerpo ideal” que predominan en el entorno. Algunas mujeres entrevistadas aseguran haber recurrido a sustancias peligrosas como biopolímeros, e incluso aceite industrial, inyectadas por personal no calificado, poniendo en riesgo su vida por alcanzar un ideal estético.
Aunque algunas mujeres han decidido abandonar esta práctica tras enfrentar consecuencias físicas severas, otras siguen atrapadas en la dinámica de agrandar, reducir o modificar constantemente su imagen para responder a lo que consideran exigencias del mercado, la pareja o las redes. Especialistas advierten que el verdadero peligro radica en no reconocer los límites, y llaman a reforzar campañas de educación sobre salud estética y autoestima.
