En el programa Mujeres al Borde, conducido por Ingrid Gómez, el cirujano plástico Dr. Rafael Lloberes-Francis explicó con detalle los riesgos que representan los biopolímeros, sustancias tóxicas y prohibidas que muchas mujeres se han inyectado para aumentar glúteos u otras partes del cuerpo. El especialista, reconocido por su experiencia en la extracción de este tipo de materiales, señaló que los biopolímeros no son productos médicos y que en la mayoría de los casos provienen de aceites industriales o siliconas sin control sanitario.

El doctor aseguró que ningún médico ético debería aplicarlos, ya que su uso está prohibido en todo el mundo. “Son venenos que el cuerpo no puede procesar. Engañan al sistema inmunológico y causan inflamación, dolor, endurecimiento y migración del material hacia otras zonas del cuerpo”, explicó. Asimismo, recomendó que los únicos procedimientos seguros para aumentar los glúteos son los realizados con grasa propia del paciente o con implantes diseñados específicamente para ese propósito.

Lloberes-Francis resaltó que el desconocimiento y la desesperación llevan a muchas mujeres a ponerse en manos de personas sin preparación médica, lo que ha provocado graves consecuencias de salud y daños irreversibles. El especialista reiteró la importancia de acudir a profesionales certificados y con experiencia, y subrayó que hoy en día existen técnicas seguras que permiten extraer los biopolímeros y reconstruir el área afectada. “El cuerpo puede recuperarse, pero nunca con productos ilegales”, concluyó.