El presidente del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Ignacio Paliza, lideró este martes una reunión de seguimiento al Plan de Seguridad Ciudadana, en la que se revisaron las tareas asignadas, los logros alcanzados y las nuevas medidas a implementar para mantener y fortalecer la protección de los dominicanos. El encuentro contó con la presencia de los ministros de la Presidencia y de Defensa, así como del director de la Policía Nacional, quienes expusieron el estado actual de sus iniciativas y proyectaron los próximos pasos en materia de prevención del delito y control del orden público.

Por videoconferencia desde España, se unió la ministra de Interior y Policía; en tanto que de forma presencial asistieron la Procuradora General de la República, el comandante general de la Armada y representantes del Comando Conjunto Unificado. También participaron los titulares de la Dirección Nacional de Control de Drogas, del Consejo Nacional de Drogas y de Migración; así como los directores generales de la Comisión Militar y Policial de la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre, de la Policía de Turismo y del Sistema Nacional de Atención de Emergencias y Seguridad 911. Para garantizar el acompañamiento judicial, la reunión incluyó una comisión de fiscales de distintas jurisdicciones del país.

El Plan de Seguridad Ciudadana en la República Dominicana es una estrategia integral diseñada por el Gobierno para reducir los niveles de criminalidad, fortalecer la prevención del delito y garantizar la protección de la población en todo el territorio nacional. Este plan involucra la coordinación entre diversas instituciones del Estado, incluyendo el Ministerio de Interior y Policía, la Policía Nacional, las Fuerzas Armadas, el Ministerio Público y otras entidades claves, con el fin de implementar acciones concretas como el patrullaje mixto, el desarme de civiles, la vigilancia por cámaras de seguridad, y programas sociales orientados a jóvenes en riesgo.

Además del componente policial y militar, el Plan también contempla medidas estructurales enfocadas en mejorar el entorno social, como la recuperación de espacios públicos, la promoción del deporte, el empleo y la educación en zonas vulnerables. Con un enfoque multidisciplinario, se busca atacar las causas profundas de la violencia y el crimen, promoviendo una cultura de paz y convivencia ciudadana. La ejecución del plan es monitoreada regularmente mediante reuniones interinstitucionales de evaluación, donde se revisan resultados y se definen ajustes para una mayor efectividad.