El ex manejador conocido como Papi Juan reclama judicialmente a Omega el pago de RD$9,300,000 por una sentencia que, según sus abogados, le fue favorable. La orden obliga al artista a saldar la suma por prestaciones laborales y, de no cumplirse, se advierte que cualquier establecimiento que lo contrate podría recibir notificaciones y ser demandado.

Fuentes legales confirman que el vehículo judicial del reclamo ya está en ejecución y que promotores y empresarios del espectáculo podrían quedar expuestos a litigios si mantienen contratos con Omega. La demanda reaviva interrogantes sobre la demora en actuar por parte del ex manejador y sobre la viabilidad real de ejecutar una sentencia contra un artista cuya capacidad de pago, según allegados, estaría limitada mientras permanezca con impedimentos para trabajar.

El conflicto también encendió advertencias y temores en el entorno artístico: comentarios públicos especulan sobre posibles represalias personales si Papi Juan logra cobrar. En lo inmediato, el caso amenaza con congelar presentaciones y generar una ola de cancelaciones preventivas en el circuito de entretenimiento hasta que se aclare la situación judicial.