SANTO DOMINGO.– El economista Jaime Aristy Escuder analizó este lunes en Enfoque Final los pilares de lo que denominó “la reforma de Magín”, un esquema basado en las propuestas del ministro de Hacienda, Magín Díaz, para garantizar la sostenibilidad fiscal y la estabilidad macroeconómica de la República Dominicana. Según explicó, el país enfrenta un déficit estimado en 3.4% del PIB y una deuda pública cercana al 60%, cifras que “obligan a actuar antes de que el escenario se vuelva inmanejable”.

Escuder señaló que la primera fase de la reforma debe comenzar con un recorte drástico del gasto superfluo, así como la eliminación de subsidios generalizados que —según afirmó— terminan beneficiando más a los sectores de altos ingresos. También insistió en la necesidad de reducir el déficit del sector eléctrico, que cada año demanda al Gobierno transferencias equivalentes al 1.4% del PIB para sostener las distribuidoras de energía.

El segundo paso, explicó, es atacar la evasión fiscal con una estrategia de eficiencia tributaria. Datos citados por el economista indican que una mejora estructural en la administración podría aumentar en hasta cuatro puntos del PIB la presión tributaria, lo que representaría miles de millones adicionales para el fisco sin necesidad de incrementar impuestos.

El tercer componente clave es la eliminación de exenciones e incentivos que no demuestren beneficios reales para el desarrollo nacional. Escuder enfatizó que cualquier privilegio fiscal debe superar un análisis riguroso de costo-beneficio para justificar su existencia en un sistema donde cada peso cuenta.

Finalmente, tras completar estos tres pasos, el país estaría en condiciones de avanzar hacia una modificación integral del Código Tributario, que permita construir un sistema “equitativo, neutral y capaz de generar ingresos sin afectar la productividad ni las decisiones de ahorro e inversión de los agentes económicos”.

“Si se hace en el orden correcto, la reforma fiscal no tiene que ser traumática”, concluyó Escuder. “Es una necesidad para que el país mantenga su estabilidad y pueda enfrentar los desafíos económicos de la próxima década”.