Un grupo internacional de artistas consiguieron la marca utilizando 11.000 toneladas de arena y consiguieron edificar el castillo con 17,66 metros de altura.

Un enorme castillo de arena construido en el municipio costero alemán de Binz consiguió este 5 de junio el récord Guinness por ser la estructura más alta jamás hecha de ese tipo.

La obra fue galardonada después de que un juez del Libro Guinness de los Récords y un topógrafo local constataran que la altura del castillo era de exactamente 17,66 metros, superando por 98 centímetros a la anterior marca.

Para su edificación se utilizaron 11.000 toneladas de arena que se mezclaron solo con agua, sin contar con una estructura de soporte interna. Los responsables del castillo de arena más alto del mundo fueron 20 miembros de la compañía Skullptura Projects GmbH. El grupo incluía artistas de los Países Bajos, Rusia, Hungría, Letonia y Polonia.

La construcción forma parte de una exposición local de esculturas de arena y se podrá visitar hasta el 3 de noviembre.

El récord anterior lo ostentaba otro castillo de arena alemán, de 16,68 metros, construido en una planta de carbón y acero en 2017 por Schauinsland-Reisen GmbH, en Duisburg.