Tras varios días de incertidumbre, familiares confirmaron la trágica noticia de que Luis Antonio Ventura Fernández, reportado como desaparecido desde el domingo, fue hallado muerto en la habitación número 13 de la cabaña turística Montebello, ubicada en la carretera Mao–Esperanza.

El levantamiento del cadáver, realizado por el médico legista, determinó que Ventura Fernández llevaba más de 26 horas sin vida al momento del hallazgo. El cuerpo fue encontrado sobre la cama, presuntamente tras la ingesta de sustancias químicas tóxicas.

De acuerdo con versiones de sus parientes, la víctima, descrita como un hombre trabajador, honesto y de familia, dejó una carta pidiendo perdón a su esposa, Annalisa Montesinos, y a sus dos hijos, a quienes dedicó sus últimas palabras.